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ACS Energy Letters
El hierro y sus aleaciones, como el acero y el hierro fundido, dominan el mundo moderno, y hay una demanda creciente de productos derivados de este metal. Habitualmente, los altos hornos transforman mineral de hierro en metal elemental purificado, pero el proceso requiere mucha energÃa y contamina el aire. Ahora, los investigadores de ACS Energy Letters informan que han desarrollado un método más limpio para extraer hierro de un mineral de hierro sintético mediante un proceso electroquÃmico, que, según dicen, podrÃa competir con los altos hornos en términos de costos.

“Identificar los óxidos que pueden convertirse en metal de hierro a bajas temperaturas es un paso importante en el desarrollo de procesos para la fabricación de acero que estén totalmente basados en electricidad�, dice Paul Kempler, autor del estudio.
Con la obtención electroquÃmica de hierro, se aÃsla el metal al pasar electricidad a través de un lÃquido que contiene materias primas con hierro. En comparación con los altos hornos a temperaturas elevadas, el proceso electroquÃmico podrÃa reducir significativamente las emisiones de contaminación atmosférica, como gases de efecto invernadero, dióxido de azufre y material particulado, y sugiere un ahorro de energÃa considerable. Anteriormente, Kempler y colegas utilizaron este proceso para convertir soluciones que contenÃan partÃculas de óxido de hierro sólido (III) e hidróxido de sodio directamente en hierro elemental a temperaturas de entre 176 °F y 194 °F (80 °C y 90 °C). Sin embargo, al probar algunos minerales de hierro natural con partÃculas densas e impurezas de tamaño irregular, este proceso a baja temperatura no resultaba suficientemente eficaz. Por lo tanto, Kempler y un nuevo equipo de investigadores liderados por Anastasiia Konovalova y Andrew Goldman se reunieron para intentar entender qué materias primas similares al mineral de hierro podrÃan apoyar el crecimiento escalable del proceso.
Primero, los investigadores prepararon partÃculas de óxido de hierro con un área superficial especÃfica elevada, orificios internos y cavidades conectivas para investigar cómo impactaba la morfologÃa a nanoescala de las partÃculas en la reacción electroquÃmica. Luego, convirtieron algunas de ellas en partÃculas de óxido de hierro de un micrómetro para imitar la morfologÃa de los minerales naturales. Estas partÃculas contenÃan solo unas pocas impurezas traza, como carbono y bario. El equipo diseñó un cátodo especializado para extraer metal de hierro de una solución de hidróxido de sodio que contenÃa las partÃculas de óxido de hierro a medida que la corriente pasaba a través de él. En los experimentos, los óxidos de hierro densos se redujeron, o se convirtieron en hierro elemental, de manera más selectiva a una densidad de corriente de 50 miliamperios por centÃmetro cuadrado, similar a la de las baterÃas de iones de litio de carga rápida. Por el contrario, las partÃculas sueltas con mayor porosidad y, por lo tanto, mayor área superficial, facilitaron una producción electroquÃmica de hierro más eficiente, en comparación con las fabricadas para parecerse a la hematita de mineral de hierro natural menos porosa.
Los investigadores evaluaron el coste potencial de su método de obtención de hierro mediante procesos electroquÃmicos. A la densidad actual utilizada en los experimentos, estimaron que podrÃa producirse hierro a menos de USD 600 por tonelada métrica (USD 0,60 por kilogramo), lo que es comparable a la producción tradicional. El estudio demostró que se pueden obtener densidades de corriente mucho mayores, de hasta 600 miliamperios por centÃmetro cuadrado, similares a las utilizadas en las celdas de electrólisis industriales, al usar partÃculas con porosidad a nanoescala. Para que esta tecnologÃa se pueda adoptar comercialmente, se necesitarán nuevos avances en materia de diseño de celdas electroquÃmicas y técnicas para hacer que las materias primas de óxido de hierro sean más porosas.
Los autores agradecen la financiación de la Oficina de Ciencia y la Oficina de Ciencias Básicas de la EnergÃa del Departamento de EnergÃa de EE. UU.
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